Recientemente se daba por concluida la cuarta edición del concurso televisivo de talentos musicales La Voz. A lo largo de varias semanas, decenas de concursantes se dieron cita en el programa para demostrar su valía como cantantes. Asimismo, varios artistas consagrados asistieron al programa durante su transcurso para dar apoyo y ejemplo a los participantes.
El despliegue de infraestructura audiovisual que se necesitó para un espectáculo de las características de La Voz fue de gran envergadura y su planteamiento y posterior operación fue llevado a cabo por la empresa SBA Radical Sound, que seleccionó equipos específicos de Shure y Soundcraft. Earpro ha tenido la oportunidad de entrevistar a Víctor Ondaro, su responsable de ingeniería, para ayudarnos a conocer de primera mano los pormenores del proyecto.
Pregunta: ¿Cuáles fueron las necesidades técnicas con las que os encontrasteis al empezar a hacer frente al proyecto de sonorización y retransmisiones de la Voz?
La Voz: Cuando en SBA Radical Sound comenzamos a realizar el diseño de La Voz IV, nos encontramos con el reto de hacer frente a dos disciplinas del sonido que normalmente caminan por separado: la música en directo y las emisiones televisivas. Por tanto, la necesidad que se nos planteó fue la de transmitir la energía de una interpretación en vivo, atendiendo a la vez a todos los detalles de una emisión exigente. Para ello necesitábamos un equipo de profesionales de primer nivel, un estudio pormenorizado de cada uno de los puestos técnicos y unos sistemas versátiles y fiables, que nos aseguraran el éxito en todos los casos de sonorización a los que nos enfrentaríamos a lo largo de las fases del concurso.
P: ¿Podrías, por favor, describirnos la solución técnica que diseñasteis?
VO: Contamos con tres controles de plató y una unidad móvil de emisión. Cada uno de estos controles tenía un tratamiento distinto del sonido y unas necesidades diferentes. Respecto al conexionado, teníamos un patch que centralizaba 150 canales spliteados, grabación discreta de estos canales, 45 envíos a monitores, 90 canales de instrumentos tocados por 13 músicos, más las voces de los concursantes e invitados. En cuanto a las transmisiones inalámbricas, contamos con 160 frecuencias propias del espectáculo entre microfonía, in-ears, eng y comunicaciones.
P: ¿Qué equipos de Shure y Soundcraft formaron parte de esta solución y qué resultados habéis conseguido con ellos?
VO: Valorando las diferentes soluciones técnicas que el mercado nos ofrecía, en los controles nos decantamos por la nueva gama Vi de Soundcraft. Usamos dos Soundcraft vi7000 y una vi5000. El núcleo de las comunicaciones entre controles lo teníamos en el Local Rack con tecnología Studer, que nos ofreció una solución broadcast en el tratamiento de señales y, sobre todo, de comunicaciones entre controles. El MADI por cable cat5 nos ofreció un protocolo estable y versátil, que utilizamos para la infraestructura de señal principal. También hay que destacar la posibilidad de comunicarnos vía DANTE, protocolo que se ha convertido en un standard en la industria del audio.
Las superficies de control con la tecnología Vistonics consiguen una rápida curva de aprendizaje y fluidez en el manejo de las consolas, algo imprescindible para una empresa de servicios como SBA y para las exigencias que se plantean al hacer un programa en directo. De esta manera, conseguimos centrarnos en el tratamiento diferenciado de cada uno de los canales con los que trabajamos, teniendo en cuenta si estábamos en P.A., en monitores, etc. La gran cantidad y calidad de plugins y el RealTime Rack supusieron una ayuda imprescindible para este tratamiento y para poder dar soluciones técnicas óptimas a los artistas que pasaron por el concurso.
Para la microfonía, SBA Radical Sound ha contado, como viene siendo habitual, con las gamas altas de Shure. La robustez de los sistemas, junto con la magnífica gestión conseguida con el software Workbench 6, nos dió la tranquilidad que necesitábamos para las transmisiones con 70 emisores del sistema UHF-R (donde son 35 unidades UR1 y 35 unidades UR2 con cápsulas sm58 y KSM9), y con 16 emisores de la serie digital ULXD. Para conseguir la mayor fiabilidad en los directos, y poder centrar las fuerzas en otros apartados se añadieron sistemas de la excelente serie AXIENT.
El gran peso de la monitorización in-ear recayó sobre la serie PSM 1000, en el caso de artistas invitados y coaches. Gracias a su recepción diversity y la calidez del audio, aseguraron que los artistas se sintieran cómodos en todo momento. Los concursantes contaron con la serie PSM 900, junto con los auriculares in-ear Shure SE215, quedando impresionados al notar una calidad muy por encima de lo habitual.
La presencia de Shure y Soundcraft en La Voz da buena cuenta de la reputación, fiabilidad, calidad y dilatada experiencia de los sistemas de ambas marcas en proyectos de estas características y envergadura.
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