Para que cuando el artista llegue a su escenario todo esté a punto, el Club Regent Event Centre está completamente equipado y automatizado para adaptarse, en cuestión de minutos, a más de una docenes de preconfiguraciones de gradas en función del tipo de espectáculo.
Por suerte, este local de 1.400 localidades de Winnipeg (Manitoba, Canadá), que forma parte del Club Regent Casino, tiene un sistema de audio que suena de maravilla basado en equipos K3 de L-Acoustics.
“El entorno es tremendamente flexible, y el sonido está a la altura de cualquier circunstancia”, comenta Martin Van Djik, consultor principal y socio de Engineering Harmonics, la empresa encargada de diseñar el sistema instalado por Solotech. Y lo cierto es que no le falta razón. La configuración de audio está formada por sistemas de colgado de izquierda a derecha, cada uno con ocho K3, seis subwoofers KS21 por lado, ocho arreglos de tres Kiva II para el retardo, ocho sistemas de relleno frontal coaxiales X8, dos sistemas de relleno lateral X12 más grandes, cuatro sistemas de relleno para suelo A15 Wide y un sistema de relleno central compuesto por un K3 y cuatro Kara II.
Todos los equipos de sonido son alimentados por amplificadores LA12X y cuatro LA4X, conectados a una red de audio mediante seis conmutadores de red LS10 AVB. Del control se encarga una consola Quantum338 de DiGiCo instalada por la integradora AVG.
“Tuvimos que crear un sistema que brindara una cobertura impecable y uniforme por todo el espacio, fuera cual fuera su configuración (teatro, salón de baile, palacio de congresos o evento benéfico, por ejemplo). Cada configuración tiene sus propios requisitos, y este sistema de sonido se adapta a todas ellas”. Por ejemplo, la parte trasera se puede adaptar para adoptar un espacio más íntimo, cambiando la cobertura de los Kiva II según sea necesario.
También hubo que prestar especial atención al bajo techo del centro. Por esta razón los sistemas de retardo son tan importantes; sin ellos, el sonido no cubriría las zonas de asientos más retiradas. “Aumentando el número de altavoces logramos la cobertura que necesitábamos y no tuvimos que sacrificar ningún ángulo ni la calidad del sonido”.
L-Acoustics tiene un producto específico para cada necesidad. Los K3 son ideales para aplicaciones de largo alcance, entornos donde haya que reforzar las bajas frecuencias o dónde se necesite un elevado ancho de banda en un espacio limitado. Y es que Van Djik decidió hacerse con los K3 sin siquiera haberlos oído antes.
También son dignos de mención los recién adquiridos altavoces de la serie A, cuyas versiones A15 Wide se están usando para el relleno a ras de suelo.